martes, 24 de marzo de 2009

¡HOY! MARCHA EN BUCARAMANGA POR LOS PRINCIPIOS Y VALORES

La Fundación Columbia College, es una institución educativa con Programas técnicos laborales y educación continuada (cursos, seminarios, diplomados), donde ha decidido no sólo dedicarse a su función como entes capacitadores, sino también quiere dinamizar e inculcar con los estudiantes la importancia de los valores y urbanidad en los claustros educativos.

Es por eso que hoy, viernes 27 de Marzo de 2009 a las 10:00 am, lo invitamos a participar de una marcha pacífica de sensibilización, donde se llevará carteleras y publicidad alusiva a la importancia de volver a tener los temas más importantes de la urbanidad de Carreño, los valores, normas de comportamiento social, ciudadana y cívica en la educación Santandereana. Iniciaremos en la carrera 27 con Avenida González Valencia hasta la calle 36 y luego se desciende hasta la plaza cívica Luis Carlos Galán, donde se desarrollará un programa educativo.
Conocedores de la gran importancia y reconocimiento que tiene su labor en la ciudad, lo invitamos muy respetuosamente, para que nos acompañe en esta bella obra, con su ayuda muchas personas conocerán de nuestra propuestas para que se unan, y nos acompañen en nuestra caminata por recuperar los valores.

Asimismo informamos que ya contamos con el permiso de la secretaría de gobierno municipal y demás permisos pertinentes.

Aclaramos que la marcha es totalmente pacifica, y no generará ningún conflicto, al contrario generará sentido de compromiso por la educación con calidad y exigiendo la presencia de cultura y valores, que hoy por hoy, se están perdiendo. Por eso con su ayuda dejaremos a nuestras futuras generaciones el amor por los valores y la responsabilidad social.

¡HACIENDO PATRIA, RECUPERANDO LO BUENO! ¡ACOMPAÑANOS!

Cordialmente,
INFORMACIÓN: PBX 6437328
¡ALGUNAS FRASES SELECTAS DE URBANIDAD Y BUENAS MANERAS!

¡Cuán propio y natural es que el hombre se dirija a su Creador, le hable de sus penas con la confianza de un hijo que habla al padre más tierno y amoroso, le pida el alivio de sus dolores y el perdón de sus culpas, y con una mirada dulce y llena de unción religiosa, le muestre su amor y su fe como los títulos de su esperanza!
Manuel A. Carreño.

En los deberes para con Dios se encuentran refundidos todos los deberes sociales y todas las prescripciones de la moral…
Manuel A. Carreño.

La caridad cristiana, es el fundamento de todos los deberes que tenemos para con nuestros semejantes, así como es la base de las más eminentes virtudes sociales.
Manuel A. Carreño.

Un señor siempre debe ceder el paso a la mujer. Un chico joven, debe ceder el paso a una persona mayor (independientemente del sexo); y lo mismo a la hora de "sujetar" una puerta para que pase alguien.
Manuel A. Carreño.

Mucho dinero y poca educación, la peor combinación.
Anónimo.

La educación es el descubrimiento de nuestra propia ignorancia.
Will Durant.

La educación no se hereda, se conquista.
André Malraux.

El mejor uso que puede hacerse de la palabra en muchas ocasiones, es callarse.
Chuang Tse.

El que te habla de los defectos de los demás, con los demás hablará de los tuyos.
Denis Diderot.

La cosa más difícil es conocernos a nosotros mismos; la más fácil es hablar mal de los demás.
Tales de Mileto.

La mayoría de las personas gastan más tiempo y energías en hablar de los problemas que en afrontarlos.
Henry Ford.

Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para aprender a callar.
Ernest Hemingway.

Si los hombres han nacido con dos ojos, dos orejas y una sola lengua es porque se debe escuchar y mirar dos veces antes de hablar.
Madame de Sevigné.

Ceder un asiento, no es una cuestión de moda sino un gesto de cortesía y generosidad hacia otra persona.
Manuel A. Carreño.

El buen fumador debe tener la cortesía de no fumar o entrar fumando, en ascensores, coches o transportes públicos, y en general, en cualquier lugar cerrado, sobre todo si este es público.
Manuel A. Carreño.

La vida puede vivirse de muchas maneras, pero no de cualquier manera.
Manuel A. Carreño.

El saludo revela muchos detalles sobre el carácter y la buena formación de una persona. Como decían nuestros mayores: "más vale saludar de más que de menos".
Manuel A. Carreño.

Nunca hay una segunda oportunidad para una primera impresión
Manuel A. Carreño.

Los hábitos del aseo revelan además hábitos de orden, de exactitud y de método en los demás actos de la vida.
Manuel A. Carreño.

Los deberes que nos impone el aseo, no se limitan a nuestras personas y a lo que tiene relación con nosotros mismos, sino que se extienden a aquellos de nuestros actos que afectan o pueden afectar a los demás…
Manuel A. Carreño.

La benevolencia, el decoro, la dignidad personal y nuestra propia conciencia, nos obligan a guardar severamente las leyes del aseo, en todos aquellos actos que en alguna manera están, o pueden estar, en relación con los demás.
Manuel A. Carreño.

La paz doméstica es el perfume delicioso que da animación y contento al círculo de la familia.
Manuel A. Carreño.

Nuestra conducta en sociedad no será nunca otra cosa que una copia en mayor escala de nuestras costumbres domésticas; así es que el hábito de ser atentos, respetuosos, delicados y tolerantes con las personas con quienes vivimos, hará resplandecer siempre en nosotros estas mismas cualidades en nuestras relaciones con los extraños.
Manuel A. Carreño.

Conduzcámonos en la calle- con gran circunspección y decoro, y tributemos las debidas atenciones a las personas que en ella encontremos; sacrificando, cada vez que sea necesario, nuestra comodidad a la de los demás, conforme a las reglas que aquí se establecen.
Manuel A. Carreño.

Cuando encontremos a una persona de nuestra amistad, acompañada de otra que no lo sea, haremos de manera que nuestro saludo las incluya a ambas.
Manuel A. Carreño.

Las personas bien educadas siempre procuran ceder la acera a los demás…
Manuel A. Carreño.

Cuando un caballero invita a una dama a subir a un automóvil que él mismo maneja, tiene la obligación de abrirle la puerta, esperar que ésta se acomode y cerrarla después.
Manuel A. Carreño.

Las personas bien educadas se abstienen severamente de levantar la voz y de entrar en discusiones acaloradas en los establecimientos públicos;
Manuel A. Carreño.

Es un acto extraordinariamente incivil el fumar dentro de un coche…
Manuel A. Carreño.

Nada hay que revele más claramente la educación de una persona, que su conversación: el tono y las inflexiones de la voz, la manera de pronunciar, la elección de los términos…
Manuel A. Carreño.

Nuestro lenguaje debe ser siempre culto, decente y respetuoso…
Manuel A. Carreño.

No emitamos nunca un juicio que hayamos formado por sospechas, propias o ajenas, o por relaciones poco fidedignas, presentándolo de modo que pueda entenderse que hablamos de un hecho real y verdadero.
Manuel A. Carreño.

Por regla general, jamás nos hagamos órgano de noticias que no hayan venido a nuestro conocimiento por conductos seguros y fidedignos, o que evidentemente carezcan de verosimilitud.
Manuel A. Carreño.

Por regla general jamás interrumpamos de modo alguno a la persona que habla.
Manuel A. Carreño.

Al dirigirse una señora hacia un lugar donde no haya asientos desocupados y se encuentre sentado un caballero, éste se pondrá inmediatamente de pie y le ofrecerá el asiento que ocupe.
Manuel A. Carreño.

No tomemos nunca asiento en la mesa antes que lo hayan hecho nuestros padres, o cualesquiera otras personas de mayor respetabilidad que nosotros, de quienes estemos acompañados.
Manuel A. Carreño.

Al ponernos a jugar, demos por hecho que la suerte no habrá de favorecernos, a fin de que este resultado no llegue nunca a sorprendernos, y a hacernos perder la serenidad y buen humor que entonces más que nunca debemos manifestar en sociedad.
Manuel A. Carreño.

Los deberes relativos a nuestro vestir no están fundados únicamente en nuestra propia estimación, la cual exige siempre de nosotros un porte honesto y elegante, sino en la consideración que debemos a la sociedad en que vivimos,
Manuel A. Carreño.

Debemos respetar todas las condiciones sociales, considerando en cada una de ellas la dignidad y el valor intrínseco del hombre, sin establecer otras diferencias que aquellas que prescriben la moral y la etiqueta…
Manuel A. Carreño.

Evitemos cuidadosamente el decir de nosotros ninguna cosa que pueda directa o indirectamente ceder en nuestro propio elogio.
Manuel A. Carreño.

Evitemos en cuanto nos sea posible el hablar a una persona sobre su edad, y guardémonos de decir a nadie la que creamos representa en su exterior, aun cuando nos excite expresamente a ello.
Manuel A. Carreño.

La moderación es la reguladora de los modales exteriores, así en el hombre como en la mujer; pero la organización física y moral del hombre, la mayor agilidad que adquiere en todas sus faenas…
Manuel A. Carreño.

Siempre que en sociedad nos encontremos de pie, mantengamos el cuerpo recto, sin descansarlo nunca de un lado, especialmente cuando hablemos con alguna persona.
Manuel A. Carreño.

Cuando a una persona se le caiga al suelo algún objeto, el caballero que se halle más inmediato a ella se apresurará a levantarlo, poniéndolo luego en sus manos con cierta gracia y delicadeza en los movimientos.
Manuel A. Carreño.

Siempre que saludemos a una persona, además de hacerle una cortesía, mostrémosle un semblante afable…
Manuel A. Carreño.

Es enteramente vulgar y grosero el tutear a una persona con quien no se tiene una íntima confianza.
Manuel A. Carreño.

Seamos severamente puntuales en asistir siempre a toda reunión de que hayamos de formar parte, a la hora que se nos haya señalado y en que hubiéramos convenido.
Manuel A. Carreño.

Acostumbrémonos a ejercer sobre nosotros todo el dominio que sea necesario para reprimirnos en medio de las más fuertes impresiones.
Manuel A. Carreño.

Nada puede haber más indigno de una buena educación que el faltar a la verdad, sobre todo cuando esto se hace por costumbre.
Manuel A. Carreño.

La generosidad es otra virtud social, enteramente inseparable de la buena educación.
Manuel A. Carreño.

La igualdad en el trato es uno de los más importantes atributos de la buena educación.
Manuel A. Carreño.

Uno de los más sagrados deberes que la religión, la moral y la misma naturaleza nos imponen, es el de dar a los niños que nos pertenecen una educación que les abra y allane el camino de su felicidad, y los haga al mismo tiempo útiles a su familia y a su patria.
Manuel A. Carreño.

Debe, cuidarse esmeradamente de cultivar el sentimiento de la gratitud, no borrando jamás del alma el bien que se reciba, por pequeño que sea, y aprovechando siempre las ocasiones que la fortuna ofrezca para recompensarlo.
Manuel A. Carreño.

El hombre de buenos principios no sólo sabe conducirse dignamente con las personas con quienes está relacionado, sino que tributa también sus consideraciones a la sociedad entera…
Manuel A. Carreño.

martes, 10 de marzo de 2009

DE LA URBANIDAD Y DE SUS VENTAJAS

Urbanidad es la feliz combinación de la moral y de la gracia, se debe considerar bajo este doble punto de vista y presidir, por consiguiente, tanto a nueslros más importantes deberes cómo a nuestras más frivolas diversiones. Cuando se la considera bajo este último aspecto, se creerá acaso que basta únicamente el trato de la buena sociedad para inspirar el hábito y el gusto de estas formas modestas y benévolas que constituyen la verdadera urbanidad; este es un error.

El decoro en los modales es el fruto precioso del conocimiento de sí propio y del respeto de los derechos de los demás, es el sentimiento de los sacrificios impuestos al amor propio por las relaciones sociales, es en fin una piadosa necesidad de afecto y de concordia. Mas el trato del mundo no es más que el barniz o mejor dicho la parodia de la urbanidad, pues que en vez de apoyarse como ella sobre la sinceridad, la modestia y la oficiosidad, se limita tan solo a no hacerse molesto sobre cosa alguna, a burlarse igualmente de sus sentimientos y sus debilidades, como de los defectos y virtudes de los demás, con tal que se haga con gracia y que nunca se vaya tan lejos que pueda herirse el amor propio de alguna persona.

Gracias a la costumbre, basta para ser reconocido por amable que aquel a quien se dirige una burla de mal género pueda reír tanto como el agresor. El trato del mundo no es por lo general mas que un hábil cálculo de la vanidad, un juego frivolo del entendimiento y una observancia superficial de las formas; falsa urbanidad que conduciría a la frivolidad o a la perfidia, si la verdadera no la inspirase la delicadeza, la reserva y la benevolencia. Oh!, si las prácticas del buen tono no se hubieran apartado jamás de esta virtuosa amabilidad, no veríamos a las gentes sencillas y buenas desconfiar de la urbanidad y cortesanía, y victimas de un farsante exclamar justamente con un acento lleno de amargura: este es un hombre cortesano; ni nunca se habrían separado de la debilidad y la cultura los eternos principios de la virtud.

El amor del bien, la virtud en una palabra es el alma de la política y urbanidad: el sentimiento de una justa armonía entre nuestros intereses y nuestras relaciones sociales es también indispensable a esta agradable cualidad. El buen humor excesivo, la alegría delirante, las grandes penas, la cólera, el amor, los celos, la avaricia y generalmente todas las pasiones son el escollo ordinario de la urbanidad. La medida en todas las cosas le es en tal grado necesaria que seria una falta contra ella poner demasiada afectación en observarla.


A la urbanidad, a sus justas y amables deferencias y consideraciones se debe todo el encanto, y aun se puede añadir la posibilidad de vivir en sociedad. Efecto y causa de la civilización, se apodera del gran móvil del espíritu humano, el amor propio, el deseo de agradar, para purificarle y ennoblecerle; para sustituir a el orgullo y a todas las odiosas pasiones que engendra, la benevolencia con todos los amables y generosos sentimientos que ella inspira. En una sociedad de personas verdaderamente corteses, el mal parece ignorado: lo justo, lo bello, lo bueno bajo el título de lo admisible y conveniente, se hacen sentir en todas partes; las acciones, las maneras, el lenguaje, lo manifiestan igualmente. Si a una de estas sociedades escogidas se llevara una de esas personas extrañas a los beneficios de una esmerada educación, bien pronto conocería su valor y querría inmediatamente reproducir en ella y en cuanto la rodea la urbanidad que le ha encantado.

La urbanidad dice M. Aimé Martin, se refiere a las costumbres y hace parte de la moral; es el saber vivir, es la decencia, el respeto de los demás y de sí propio, es por último el respeto de las cosas divinas; pues es preciso no confundirla con el bien decir es el hacer bien. Un farsante no podría enseñarla, la da la educación del alma, y acaso no existe un signo exterior no solo de urbanidad sino de simple política que no tenga su principio moral mas o menos próximo.


Hemos visto desaparecer la cortesanía en los sangrientos dias del terror, y lo que da a esta época un carácter único en la historia, no es que haya habido verdugos, sino que estos hayan mostrado placer en manifestarse bajo las formas mas abyectas. Es un espectáculo digno de las meditaciones del Legislador, un gran pueblo civilizado y sin finura de modales.


Hoy mismo el sentimiento de urbanidad se encuentra debilitado entre nosotros. En los pueblos antiguos estaba reglado por la virtud, en nuestros mayores por las delicadezas del honor; mas nuestras revoluciones sucesivas han apagado este último móvil y cambiado el carácter de la nación.


Si la urbanidad es necesaria en general, no es menos indispensable en particular. Rango, fortuna, talento, belleza, nada dispensa de la amenidad: nada puede inspirar la consideración ni el amor ni esa afabilidad graciosa, esa dulce dignidad, esa elegante simplicidad que constituyen el hombre fino.


Cada uno siente que la gracia dispuesta a servir agrada más que el mismo servicio, y que una sonrisa benévola, un tono afectuoso conmueve mas el corazón que la más brillante frase.
En cuanto a la parte técnica de la urbanidad en las cosas de pura fórmula, el hábito de la sociedad y de saludables consejos son sin duda alguna muy útiles; mas el gran secreto para no faltar a las reglas del buen tono es tener siempre el ánimo de portarse bien. En una tal disposición de ánimo, la exactitud en practicar las buenas reglas parece a todos llena de encanto y de poder; y no solamente entonces son excusables las faltas, sino que son agradables por el descuido y la sencillez.


Como San Agustín que se limitaba a decir: «amad a Dios y haced luego lo que gustareis» nosotros repetiremos a los jóvenes principiantes en el mundo; sed modestos, benévolos, y no os inquietéis de las faltas de vuestra inexperiencia; un poco de atención, los consejos de un amigo, podrán brevemente rectificar esos ligeros errores. Yo quiero ser este amigo. Encargándome de repisar y refundir el manual de la buena sociedad, hé deseado seros útil y he contraído este compromiso. Una distribución más metódica de la obra, acompañada de detalles más positivos y más variados, y de importantes aplicaciones para todos los estados y circunstancias de la vida, me atrevo a creer acabarán de hacer este tratado digno de su destino.


(Fuente: Nuevo Manual de la Buena Sociedad o Guía de la Urbanidad y de la Buena Educación. Autora: Madame Celnart. 1.854).


Nota: Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia, para conocer la historia y evolución social de los buenos modales y la etiqueta así como la transformación de la sociedad y sus costumbres, pudiendo contener conceptos y comportamientos anacrónicos y desfasados para la sociedad actual.

sábado, 7 de marzo de 2009

QUÉ ES APRENDIZAJE ACTIVO


¿Que es el aprendizaje activo?
Proceso que compenetra a los estudiantes a realizar cosas y a pensar en esas cosas que realizan. En pocas palabras es, simplemente, "aprender haciendo".

• Activo en el proceso
Todo estudiante empieza su aprendizaje leyendo, con sus libros al lado, oyendo ejemplos de ciertas personas que lo comunican.
Un ejemplo puntual es el aprendizaje que se dio todo el semestre de ética en el college, el cual se comenzó con reflexiones, guías y conversaciones amenas en grupo, las cuales se iban evaluando para saber que se había aprendido de las reflexiones y guías que el profesor iba enviando, esta es una forma común de aprender y mecanizar y tal ves comparar con lo que ya se a hecho a lo largo de nuestras vidas, pero en realidad la mejor forma de ponerlas en practica es utilizarlas en nuestro diario vivir, donde cada experiencia de vida que vayamos teniendo a diario la vayamos practicado para que así se complemente la forma pasiva con nuestro aprendizaje activo. Esto nos ayudara no solo aplicarlo a nuestras vidas si no tener el poder de instruir a las personas con este método de aprendiza el cual no solo se dedicara a enseñarlo si no activarlo ya que un gran porcentaje de persona lo tiene activo si no que aun no lo sabe y si lo sabe no lo pone en practica.

CARACTERÍSTICAS DEL APRENDIZAJE ACTIVO

• El aprendizaje activo es una aventura
El aprendizaje activo siempre tiene muchas sorpresas. El aprendizaje pasivo es muy predecible, es cuando se sabe a que horas va a comenzar una clase y a que horas va hacer su final, donde ya se tiene mecanizado lo que se va a aprender, cuales van a ser los temas a tratar, donde los estudiantes escuchan a su profesor atentamente toda la clase o donde un conferencista dura cuatro horas hablando sobre un tema en particular, explica enseña toda la conferencia pero nunca refleja actividad con los estudiante, solo al final se dirige a ellos preguntando, ay una duda sobre lo que se hablo y obviamente los estudiantes con sueño y otros con ya me quiero ir dicen, no todo quedo muy claro. El aprendizaje activo, el alumno aprenderá nuevas lecciones junto con el maestro ya que el maestro dirige su clase o su método de enseñanza a la par con el alumno, donde juntos expondrán su conceptos y sus habilidades cotidianas, para obtener un aprendizaje muto y activo y al mismo tiempo muy confortable para las dos partes, por que se aprendió de una forma con sentido común y no mecanizado con los libros y las frases de memoria, al final llegando a la conclusión de que el alumno aprendió y el profesor aprendió un poco mas a través del alumno.

• El aprendizaje activo es divertido.
“Se ha demostrado que la concentración de un estudiante durante una clase expositiva declina después de los primeros 15 minutos” Para los jóvenes no les resulta divertido ir a clases a escuchar a su maestro hablar de geografía o matemática, si pueden estar con sus amigos divirtiéndose, haciendo cosas que según su concepto son mucho mas interesantes que ir a clases, y es ay el error de los profesores o directivos de un plantel educativo al juzgar el porque de este desinterés, pues siempre llegan a la misma conclusión que los estudiantes son perezosos y desinteresados en las clases, pero no se preocupan por mejorar sus tácticas educativas, donde no solo se involucre el profesor si no también el estudiante, donde se puedan explotar las diferentes habilidades del estudiante.

• El aprendizaje activo involucra a todos.
No hay espectadores pasivos en el aprendizaje activo, esto es cuando una persona esta aprendiendo a hacer figuras en origami, observa primero a la persona que esta haciendo estas figuras, después de ver como se hizo las figuras y de preguntar todas las inquietudes, se pasa a la practica la cual es hacer la figura, donde con el pasar del tiempo se va formando la practica y las nuevas formas de aplicar este conocimiento pero con nuevos métodos y mejores maneras de crear.

• El aprendizaje activo se basa en el alumno, no en el maestro.
“El aprendizaje activo depende de los estudiantes quienes van descubriendo, en lugar de depender de los maestros que imparten ideas y hechos.” Un alumno de diseño grafico tiene que aprender y ser consiente que el maestro puede enseñar y mostrar las diferentes herramientas de los programas que utiliza un diseñador, puede indicar para que sirve y de pronto para que ocasiones le puede ser útil, pero no puede influir a que encienda su creatividad eso ya depende única y exclusivamente del diseñador, si llega un trabajo de diseñar un cartel o un volante ay que activar la imaginación que se tiene donde solo depende de el donde escribir o aplicar color, de cómo transformar los diferentes elementos, que puede utilizar en el medio.

• El aprendizaje activo es un proceso orientado.
El aprendizaje pasivo, el profesor envía ciertas guías para que el estudiante las lea, las desarrolle y saque sus propias conclusiones. Pero en el aprendizaje activo involucra a los estudiantes, para que ellos saquen en grupo sus propias conclusiones, porque ellos descubren las razones que hay detrás de las conclusiones a las que llegaron. Por ejemplo un estudiante podría escuchar pasivamente, sobre el calentamiento global, pero si se involucran activamente y crea nuevas formas de mejorar la situación en el planeta para que este fenómeno haga un retroceso, experimentarían la satisfacción de que están ayudando a conservar el planeta para que el día de mañana sus hijos puedan verlo de la misma forma en que ellos lo ven.

• El aprendizaje activo está enfocado a través de la participación.
Es saber que la participación y la integración en grupo crean experiencias donde se comparten conceptos y nuevas formulas de vida, La participación ayuda a clasificar y ordenar la información que los estudiantes van obteniendo a través de la experiencia. Ayuda a los estudiantes a relacionar la experiencia obtenida con su vida práctica, donde se toma una actitud activa para mejora sus vidas para un mejor futuro.

• El aprendizaje activo es relacional.
El aprendizaje activo es una forma de relacionar a los jóvenes de que compartan experiencias vividas, sus conocimientos y las diferentes etapas de sus vidas.
El pasivo es un poco mas cerrado solo se involucra el estudiante en si mismo y en lo que el esta aprendiendo y no comparte otros conceptos si no los de si mismo.